28 enero 2008

- ¿No podes moverte? Y bueno, dale ¿que esperas?
- pero no puedo
- ¿como no vas a poder?
- Y no, no puedo, sino lo haría…
- ¿pero como haces para vivir así?
- Y… así, que se yo vivo, ¿que querés que me mate?
- No, pero algo tenés que hacer, andate, no se, busca otra cosa, que se yo, algo.
- ¡¡No puedo!! ¿sos sordo o pelotudo?
- En ese orden…
- Me parecía…; que se yo, ya veré, algo va a salir, algo se me va a ocurrir. Lo que pasa es que me da cagazo, no se que es lo que me da cagazo pero me da. No se como afrontar la situación, como terminarla, como hacer lo que se me canta. Admitir que la pifié, que no sirvo, que no me gusta, que no soy perfecto, que también me equivoco, que también hago cosas que no están bien. Tengo que aprender a admitir que no puedo con todo, no soy una maquina, ni el hijo perfecto, ni el hermano perfecto, ni el amigo perfecto, ni el empleado perfecto, ni el novio perfecto, ni el amante perfecto, ni una mierda; ese es el problema no se ni que mierda soy.
- Y bué… ya va a pasar
- No me diste ni pelota de todo lo que te dije ¿no?
- ¿Eh?
- Nada, forro, ¡por que no te vas un poco a la mierda!
- Eh!!! Pará no te calentes, era una joda, te estaba escuchando, dale vení, dale puto vení, era joda, eh!, eh!.. ¡bueno!, ¡andá maricón!, ya vas a volver a que te escuche ¡gil!

4 comentarios:

Agite Cultural dijo...

nadie escucha a nadie,
cada uno hace la suya,
escondiendo el salvavidas para no compartirlo.

Ele dijo...

Mi querido amigo Lucas, espero que no estemos en lo cierto.
Espero que haya gente que no.

Anónimo dijo...

Hay gente que no.

Simplemente que muchas veces hay algo que nos deja tan... tan encegecido que creemos no poder ver.
Pero mira y vas a ver que hay.
Algunos mas, algunos nunca..
Pero mirando detenidamente quizas sepamos a quien hablarle, a quien gritarle o quien no decirle nada.

Aimé

Anónimo dijo...

Tranqui Ele, somos pocos pero para algunos hay mas ganancia en el escuchar que en el decir.
Mi teoría es que cuando hablamos no hacemos mas que repetir lo que ya sabemos, y cuando escuchamos siempre aprendemos algo; por lo tanto y sin dudas gana el que pone el oído.
Ademas dicen que “el que habla siembra y el que escucha recoge ”
Entonces : ¡ yo recojo !

Silvia